Esta semana hemos realizado un experimento que nos ha llevado varios días de trabajo. Si nos acompañas, te enseñaremos los resultados. ¿Vienes con nosotros? ¡Adelante!
Pensando en un posible viaje al desierto, caímos en la idea de qué pasaría con el agua del oasis por la noche si hacía mucho frío. Para ello, decidimos hacer el experimento metiendo un poquito de agua en el congelador del colegio.
A la mañana siguiente, cuando fuimos a recoger nuestro vasito ¡¡estaba congelado y el agua también!!
Estuvimos tocando el hielo, oliéndolo y probándolo, y nos dimos cuenta de que no olía ni tenía sabor alguno.
Pero ahí no acaba nuestro experimento, porque decidimos ver qué pasaría si dejábamos el hielo en la clase toda la noche. ¿Sabes tú lo que pasó?
¡Se convirtió de nuevo en agua! Y también comprobamos si al cambiar su estado, también había cambiado su color, olor, sabor y temperatura.
Y aunque el agua estaba fría, no tenía la misma temperatura que el hielo. De ahí surgió la parte final de nuestro experimento: ¿y si calentamos el agua muchísimo? ¿Qué crees que pasará?
¡¡Salió una pequeña nube de humo del vasito!! ¡¡El agua líquida se había convertido en vapor de agua!!
¿A que es increíble?¿Te atreves tú a probarlo en casa?
